Cuestiones sobre el incremento de casos de conducta suicida en Coahuila en el primer mes del 2024.

El fenómeno del suicidio en nuestro estado representa una crisis de salud pública alarmante. A pesar de ser una necesidad social fundamental, la salud mental a menudo ha sido relegada por algunas autoridades, exacerbando las conductas suicidas entre la ciudadanía. Actualmente, surge la interrogante crítica: ¿Son efectivas las acciones de prevención y atención al suicidio implementadas en nuestro estado?

Es crucial indagar si se han realizado estudios exhaustivos para comprender las razones específicas detrás de la creciente incidencia de suicidios en Coahuila. La revisión y el posible replanteamiento de las políticas de prevención son pasos fundamentales para abordar este problema de manera más efectiva. Debe cuestionarse el modelo de atención actual: ¿Está realmente diseñado para prevenir el suicidio o simplemente responde de manera superficial a esta crisis?
El involucramiento de la ciudadanía es esencial para una solución duradera. ¿Se han recabado sus opiniones, información y percepciones sobre las acciones actuales y propuestas? La colaboración con la población en general y la provisión de información clara y precisa sobre el fenómeno son esenciales para una respuesta coherente y eficaz.
Además, es imperativo considerar la asistencia social brindada a quienes han intentado suicidarse y a las familias de aquellos que han logrado consumarlo. Una atención integral debe abarcar no solo el aspecto de la salud mental, sino también los factores de riesgo asociados, como el acceso a servicios básicos, la atención prioritaria a grupos de riesgo, el fortalecimiento del tejido social, la participación comunitaria, y el acceso a servicios de salud mental preventiva.
Un caso reciente y conmovedor en Saltillo, donde un joven atentó contra su vida el pasado 12 de enero, ilustra la necesidad de una mayor conciencia y cuidado en la cobertura mediática. El conocido ‘Efecto Werther’, o fenómeno de imitación, plantea la pregunta de si hubo sanciones a quienes publicaron imágenes explícitas de este acto, especialmente considerando que doce días después ocurrió un incidente similar, también ampliamente difundido por los medios.

Sin embargo pareciera que ni las causas subyacentes, ni los efectos urgentes están siendo atendidos efectivamente. Es visto desde la consulta privada, que, Familias acuden a consulta privada por falta de celeridad en la atención en salud mental por parte del sector público a pesar del nivel de riesgo que presentan los usuarios que buscan este servicio, situación que podría ser contraproducente ya que en muchas ocasiones los psicoterapeutas, en su mayoría no cuentan con capacitación adecuada para el abordaje y seguimiento de este tipo de casos.
Cada vida cuenta y cada suicidio es, en cierta medida, prevenible. La responsabilidad recae tanto en la sociedad como en el Estado; solo a través de un esfuerzo conjunto y un compromiso firme podemos esperar lograr resultados contundentes en la lucha contra esta crisis de salud pública.

Por Javier Martínez
Fundador Intra A.C.